Bartolito narra detalles inéditos del poder y maquinaria del son en RD
No me pierdo las presentaciones de grupos de son en los clubes sociales de la capital. Esa contagiante expresión musical, que gana espacio en la sociedad dominicana, me penetra en lo más profundo, al igual que a los miles de dominicanos y dominicanas que lo bailan con estilo, cache y elegancia. Wilfredo Elías (Wito), Jaime Fernández Lazala y su esposa Emma, así como otros socios del son en el Club Arroyo Hondo, entre los cuales se encuentran Darío Andújar, su esposa, Grecia de Andújar; Hilda Sosa, David Abreu y su pareja Yacira, como los buenos amigos del Club Nacional de Soneros, liderados por Horacio Bakemón Rodríguez, me metieron en el disfrute de la onda sonera. Previo a eso recuerdo mi presencia en las presentaciones del Grupo Maniel en el entonces Hotel Plaza Naco, donde acudía a escuchar los sones interpretados por mi compañero de estudios Milciades Guerrero, donde compartía con muy buenos amigos, incluyendo la recién designada ministra de Educación, Josefina Pimentel. Luego d